sábado, 5 de junio de 2010

Días 5º y 6º (resumen)

Últimamente no duermo, directamente muero toda la noche. Si no fuera por que me levanto una vez a "desaguar", no cambiaría de posición en toda la noche. Quieras que no, esto cansa. Como será, que aunque tenía otras intenciones, no he sido capaz de ponerme en marcha antes de las 8:00. No veaís que dolor de piernas así en frío... y nada más levantarse... Pesa, pesa...

Después de colocarme un donuts de chocolate y un zumito, arrancamos en pos de una buena etapone. A unos 3 kilómetros de salir del camping donde he hecho noche, se ven las rampas de un cuestón. No es demasiado largo, pero las rampas son fuertes. Tranquilamente llego arriba. A partir de aquí la cosa se vuelve plana (por supuesto después de la bajada).

Paradita en un pueblo para sacar pasta, que voy flojo de efectivo. Sigo rodando bastante rápido, terreno llano y buen firme. Sorpresa: alcanzo a Elena que va otra vez sola (esto es el camino...). A partir de aquí, nos tomamos la etapa con tranquilidad por esas enormes rectas y somos capaces de llegar a Sahagún, donde coincidimos con los otros “italiani”.

Descansamos en el albergue de las monjas Benedictinas. Barato y en perfecto estado. Aprovechamos la situación, y somos bendecidos por las Hermanas en acto público, curioso acto, pues lo hacen a base de cantos en la capilla. Terminada la celebración, cenamos como todos los días, lo mejor que podemos y nos dan, para seguidamente pasar a dormir y descansar, que al día siguiente, como no, más.

Día 6 (4/06)

Otro día más de madrugar, aunque no salimos antes de las 7:30. A priori pensamos ir a dormir a Hospital de Órbigo, donde rondariamos los 90 kilómetros. Hay que aprovechar estas etapas de perfil llano para acumular kilómetros y dejar las últimas y más duras, más cortas. Se rueda bien. Incluso hay zonas del camino asfaltadas.

Después de parar en un pueblo que no me acuerdo para un 2º desayuno con los italianos, llegamos a León. Bonita ciudad. Por supuesto aquí es donde en una terracita procedemos a tomarnos la correspondiente cerveza con su pinchito de tortilla y un poquito de cecina. Hay que tomar fuerzas, que todavía queda la mitad... Es en este momento cuando pensamos que es mejor alargar la tirada hasta Astorga, pues es poco más la distancia, y llegamos a una población mucho más grande.

Entre medias nos encontramos una cueva, tipo bodega abandonada. Nos atrevemos a entrar para cotillear, pero no hay nada interesante. Ale! A seguir!

Poco más puedo contar de este día. Se hace larguiiiiiiiiiiiisimo hasta llegar a Astorga. Al final según GPS, 105 km. Te cagas la paliza que nos hemos dado. Llegamos a las 17:40. Merecida ducha y después de hacer la colada, casi que no da tiempo a hacer nada más ni a descansar. Toca reponer fuerzas. Salimos a dar una vuelta a ver que encontramos y pregunto a un chaval de una tienda de bicis, el cual me hace dos recomendaciones. Nos acercamos, comparamos y nos quedamos con el restaurante El Capricho. Sitio totalmente recomendable. Asequible de precio y calidad exquisita. Todos tomamos sopa de cocido, que estaba buenísima, aunque bien es verdad que con el palizón que nos dimos, como para que no supiera buena... Después unos filetitos de ternera con crema de queso de cabrales.... Estoy babeando otra vez.... Cenamos muy, muy bien.

Hechos todos los deberes, vamos a la cama que hay que descansar. El albergue está bastante bien, pero demasiado calor... Es lo que tiene la vida del bicigrino...

De momento, hasta aquí puedo leer. Luego más....

2 comentarios:

  1. Vamos máquina! tanto adelantar kms te tenemos aquí el lunes!

    Mucho ánimo y espero que te sirva este entrenamiento para el domingo que viene...:P

    ResponderEliminar
  2. Disfruta Martina!!!!! vale que pedaleas mucho pero menuda vidorra te estas pegando........
    Animo y muchos besos.......

    ResponderEliminar